En el mercado existe una amplia variedad de AFORE, diferentes instituciones bancarias en su mayoría se disputan las cuentas individuales, ofreciendo atractivos rendimientos que casi siempre son difíciles de alcanzar, sin embargo, la comisión que cobra cada AFORE es constante y no variable, y se cobra directamente del saldo del trabajador, no de sus rendimientos. La mejor AFORE será aquella entonces que mantenga una relación coherente con la comisión que cobra y el rendimiento que ofrece.